Renta de alojamientos vacacionales con área para fogatas en Amantaní

Con mi familia nos sentimos como en casa, muy atento el Sr. Jose pendiente en todo momento. El departamento muy bonito y acogedor, tiene 3 cuartos y 6 camas, todo impecable, Mi perrita osita fue recibida y no tuve inconvenientes.

es un lugar amplio, tranquilo, bonito y nuevo

Un alojamiento muy agradable, un entorno rodeado de naturaleza pero con restaurantes y tiendas cerca, un lugar para desconectarse y a la vez muy cerca de los lugares turísticos, a solo 20 minutos en auto del puerto de Puno. El trato del señor Héctor fue el mejor, con seguridad regresaré.

No hay suficientes estrellas en la escala para esto. Zeze fue más allá con su ayuda y disposición para mostrarnos la granja, ayudarnos a programar actividades, paseos, comida, etc. Es un guía de viaje natural que hospeda en una granja increíble. Los animales son tan maravillosos y el lugar se siente atemporal . La comunicación fue excelente. Es extremadamente tranquilo. Es como si estuvieras de vuelta en el siglo XIX, pero sin el trabajo por hacer. Este es un lugar muy, muy relajante y especial. ¡Espero volver algún día!

La casa de Norka se encuentra en una hermosa ubicación en una comunidad agrícola muy unida en el borde del hermoso lago Titicaca. La casa es perfecta para una escapada tranquila con vistas panorámicas del agua y las montañas. Está alejada de la carretera principal, por lo que debes bajar la colina para acceder a ella, como todas las casas de la zona. El representante de Norka en la comunidad es Wilber, que fue el anfitrión más amable y atento y nos ayudó a sentirnos como en casa. Proporcionó un hermoso desayuno (¡con increíble pan frito!) actividades organizadas e incluso tuvimos una comida en su casa cocinada por su esposa. ¡La trucha más fresca que he tenido! La comunidad en Luquina es simplemente increíble, así que si quieres experimentar la vida en el borde del mundo con las mejores personas, este es el lugar. La propia Norka fue muy comunicativa y súper amable. Tuvimos un problema con el wifi que resolvió de inmediato y fue muy útil en todos los demás sentidos. Una persona encantadora con buena energía que se puede sentir en la casa.

Los anfitriones fueron muy amables. Nos recogieron en el puerto, muy receptivo a los mensajes cuando teníamos preguntas. La vista es espléndida (sobre todo para la salida del sol). Y la pequeña ventaja: ¡el servicio de catering y la calidad/cantidad de la comida fueron perfectos! ¡Muchas gracias Edwin y Ruben!