Alojamientos para estancias largas en Calingasta

Recomiendo el alojamiento. Es un espacio muy calido y particular, era como un museo de epoca y con mobiliario y decoracion a corde. Nos sirvieron un desayuno casero riquísimo. el personal muy amable

una atención impecable

La finca es soñada. Fuimos recibidos por Diego que durante nuestra estadía se preocupó por que estemos cómodos. El paisaje es soñado, con vista a los viñedos y montañas donde se observan hermosos atardeceres en paz e intimidad. Aprovechamos el fogonero como el hogar de la casa y de la calidez de la gente de Barreal. Intentaremos volver a ir en primavera-verano. Un lugar dónde descansar, disfrutar de la compañía y renovar energías. Recomiendo comprar vinos del valle, en especial el Sorocayo que venden en la fina.

Excelente atención, muy buen lugar para todo aquel que quiera desenchufarse de la rutina. El lugar es muy tranquilo y con todas las comodidades. Muy Bueno!!!!