Alojamientos vacacionales en Chamela

Todo bien , Kim siempre estuvo atenta y el lugar muy bonito.

Mi estancia fue excelente. La casa tiene todo lo necesario y nos sentimos muy cómodos.

Magnífica atención de Elena, es una host excelente. La casa es hermosa y tiene todo lo necesario para pasar unos días relajado. Me encanta y cada vez que puedo regreso! Gracias por todo Elena!

La casita esta muy pequeña pero cuenta con todo lo necessrio. Me gusto mucho la decoracion de afuera. Lastima que solo estuvimos una noche y no tuvimos tiempo de disfrutar de una velada. Muy bonita casita. La recomiendo pero creo que seria mas comoda para 4 personas.

Fue una estancia placentera sin ningún contratiempo, la casa es bastante cómoda y equipada, tiene buen mantenimiento, nos fue entregada totalmente limpia y funcional cuenta con todo lo que puedes necesitar para pasar en familia, es un excelente lugar.

Excelente lugar para disfrutar en familia... Las instalaciones impresionantes, alberca realmente grande, con hermosa vista. El departamento con buena ubicación y amenidades, sin duda volveremos

Guy ha sido un gran anfitrión. El lugar era hermoso y todos pasamos un rato increíble. Definitivamente volveremos una y otra vez.

un lugar muy agradable, el pueblo es pequeño así que todo esta cerca, en general todo muy agradable, algo ruidosa la zona pero volvería a alojarme ahi.

Dominique fue una fantástica anfitriona. Es una gran comunicadora, responde de inmediato a las preguntas y nos da excelentes sugerencias y recomendaciones locales. Su casa es impresionante, las fotos no transmiten su serenidad y lo especiales y únicos que son los detalles arquitectónicos. También está bellamente decorado y bien equipado. Viajaba con mi marido y dos hijos y todos encontramos que las camas eran extremadamente cómodas con ropa de cama de calidad. La vista al mar es épica. El espacio principal es al aire libre, pero se siente privado, especialmente el dormitorio principal de arriba con su propia terraza. Las casas en este enclave tienen su propia seguridad y una playa privada. Nos sentimos muy seguros allí. La zona era tranquila en abril y a veces éramos las únicas personas en la playa. Los cocineros y cuidadores, Paty y Carmen, nos hicieron sentir como en casa. Nos cocinaron el desayuno todos los días, así como algunas cenas muy deliciosas. Ya estamos planeando nuestro próximo viaje de regreso, nos encantó nuestro tiempo aquí.