Alojamientos para estancias largas en Cheia

Adrian es un anfitrión muy cálido y servicial. La cabaña y las vistas son impresionantes. No pudimos conducir debido a la fuerte nevada y Adrian hizo todo lo posible y se ofreció a comprarnos comestibles del mercado. 10/10, siempre lo recomendaría, es extremadamente tranquilo y relajante y Adrian es tan buen anfitrión como dicen las reseñas.

Brasov un lugar formidable ! y aún más en departamento en dónde alojamos. todo estaba muy ordenado, muy amplio, con muchos detalles que hicieron de nuestra estadía un lugar increíble. solo comentar que el balcón es genial y quizás sería bueno sacarle aún más provecho, tiene unas vistas muy bonitas en dónde puedes disfrutar de un maravilloso atardecer.Alex es un tremendo anfitrion, muy preocupado, atento y servicial. sin duda volveremos dónde Alex en el futuro. muchas gracias !!! cata y Ale

La casa es muy acogedora y tranquila. La sala de estar principal tiene enormes ventanales y excelentes vistas, un gran lugar para acurrucarse con un libro o juegos de mesa. La zona exterior separada de la planta baja tiene una pequeña cocina, una gran terraza cubierta con una gran mesa de comedor y una zona de barbacoa con algunos bancos bonitos desde donde también se puede ver el gran patio trasero lleno de árboles, ideal para colgar una hamaca (que también se proporcionó). Con todo, un gran lugar para relajarse durante unos días en pareja o con algunos amigos cercanos. Vladimir también fue amable y receptivo y me ayudó con un par de pequeñas solicitudes :) Sin duda lo recomendaría

Una casa encantadora en un pequeño pueblo, rodeada de naturaleza con grandes oportunidades para pasear por el campo. Hay un largo paseo desde la estación de tren hasta la casa si tienes equipaje, pero con un coche o un viaje (como Andrei logró organizar) está bien. La casa es muy cómoda, con todo lo necesario y algo más. Trabajé mientras estaba allí, disfrutando de la conexión a Internet rápida y estable, y del entorno pacífico. El jardín también es espacioso, con muchos árboles frutales. Cuando hizo más frío, hubiera preferido controlar la calefacción yo mismo, pero Andrei fue receptivo y paciente desde lejos, y logramos que fuera cómodo para mis necesidades. Desde el principio, Andrei fue muy amable y simpático, haciendo todo lo posible para que mi estancia fuera genial. ¡Muy recomendable!