Renta de chalets vacaconales en Meta

Muy buen lugar familiar, para descansar, muy privado, todo limpio en orden, la comunicación con Néstor fue buena, estuvo pendiente de todo, y los administradores también muy formales siempre pendientes y todo, excelente lugar, lo único es que se iba la luz aveces, es lo único malo, de resto todo perfecto

Mi estadía en este Ecolodge fue simplemente maravillosa. Es el sitio perfecto para descansar, desconectarse del ritmo acelerado de la ciudad y conectarse con la naturaleza. Disfruté cada momento: desde tomar café en la mañana frente a un jardín lleno de flores y mariposas, hasta contemplar una vista espectacular por la noche. Tuvimos la oportunidad de hacer la experiencia de la ruta del cacao, que fue muy especial y enriquecedora. Todo el ambiente transmite paz y tranquilidad. Sin duda, un lugar al que me encantaría volver. ¡Gracias por una experiencia tan genuina!

La estadía fue muy agradable jacson es una excelente persona y su esposa juliana también nos atendieron muy bien La comida estuvo rica y muy cómoda en precios, la villa es hermosa y muy cómoda para despejarse del día a día Sin duda volveriamos

Todo estuvo genial, el espacio es muy cómodo, bastante grande, con muchos espacios para diferentes actividades, nos encantó a mi familia y a mi, la comunicación con Clara y Luis siempre fue muy fácil, muy dispuestos a ayudarnos en lo que necesitábamos, súper recomendados

Maravillosa estadía, encantado con el lugar, mucho más grande que en las fotos, la señora Anita una gran anfitriona igual que el señor Jorge que siempre nos ayudó con todo, recomendadisimo!

La casa es muy agradable, lo que más nos gustó es los alrededores que son verdaderamente espectaculares, se puede caminar por los alrededores. Te ayudan a prender la chimenea todos los días y son muy amables. Queda muy cerca al pueblo lo que es muy conveniente para pasear y comprar lo que se te haya quedado.

El lugar fue ideal para la celebración con mi familia, los administradores del lugar siempre fueron receptivos y estaban siempre dispuestos a ayudarnos con lo que necesitábamos. La privacidad y lo hermoso del lugar nos dieron una gran experiencia

muchas gracias por la hospitalidad, mi familia paso una grata estancia, nos recibieron con gran amabilidad a mi niñas de 1 año y 2 años, y a nuestras 3 perras. siempre nos hicieron sentir cómodos, el lugar muy organizado, limpio, los baños y la cocina amplia, una nevera dispuesta para el huésped, se puede entrar y salir a cualquier hora. todo muy agradable.

El lugar es muy tranquilo, la vía de acceso aunque estrecha está en buenas condiciones. Es un gran espacio para descansar y desconectarse. Juan Carlos fue muy amable y siempre estuvo atento a todo lo que requerimos en nuestra estancia.