Alojamientos vacacionales en Puerto Blanco

Nos encantó nuestra estancia en la casa de Yuri, la casa es hermosa, con detalles muy agradables y muy cómoda para parejas que viajan juntas. Estaba limpio y espacioso y nos encantaron las diferentes terrazas y espacios habitables para reuniones. La casa está en la colina cerca de la ciudad, debido al calor del día, decidimos tomar un taxi para bajar y subir de nuevo, pero la ubicación es genial, hermoso vecindario, estaba relajado y se sintió seguro. Organizamos el desayuno antes de nuestra estancia y fue increíble, definitivamente recomiendo esta opción. El administrador de la propiedad fue muy receptivo y servicial durante nuestra estancia. Me hospedaría aquí de nuevo con seguridad y lo recomendaría para parejas que viajan para un viaje de relajación y cultura.

Buen lugar para alojarse, la casa esta muy bonita es un fraccionamiento seguro y está como a 10 min en del centro en coche.

El espacio es hermoso y acogedor, la ubicación es excelente. Me volvería a quedar ahí!

Me he alojado en algunos alojamientos de Airbnb en San miguel en los últimos meses y el alojamiento de Jamie fue, con mucho, la cama y el espacio más cómodos en los que me he alojado. Siempre vuelvo en Uber porque es cuesta arriba, pero caminar hacia la ciudad fue muy fácil. ¡Una vez que abres la puerta, es un pequeño santuario hermoso y la vista desde la azotea es absolutamente increíble!

Erika fue una anfitriona increíble y su alojamiento era hermoso. Es uno de los pocos lugares que se ven mejor en persona que en las fotos, nos quedamos impresionados. Erika fue muy receptiva, nos ayudó con recomendaciones, planificación e hizo que nuestro viaje fuera memorable. Recomiendo encarecidamente el alojamiento de Erika, no te arrepentirás. ¡Muchas gracias, Erika!

Increíble lugar para pasar un fin de semana tranquilo y agradable. Muchas gracias por la estancia! Volveré pronto!

Está cerca de la catedral.

Juan es un gran anfitrión. La casa es muy grande y hermosa.

Este es un hermoso lugar con grandes espacios comunes, cómodas habitaciones, cocina completa, excelente azotea (donde pasamos las mañanas y las noches) y arte maravilloso. Uno está inmediatamente inmerso en la experiencia de San Miguel de Allende (incluido el popular bar El Manantial a una cuadra), y los desayunos preparados por Margarita y Julia fueron una forma relajada de comenzar nuestros días muy completos. Para nosotros, la ubicación adoquinada en la ladera proporcionó mucha necesidad de ejercicio para compensar todas nuestras indulgencias para comer/beber. Nos encantó.