Renta de cabañas vacacionales en Sierra Norte

Los Pilares de la Sierra es, de lejos, la mejor casa rural en la que he estado. Las fotos no le hacen justicia: la casa es mucho más espectacular cuando llegas. Todo está pensado al detalle para que la estancia sea perfecta, superando incluso a hoteles boutique. El jacuzzi exterior es impresionante, con vistas a los montes y el sonido del río. La casa cuenta con suelo radiante, una chimenea acogedora y todo lo necesario para hacer barbacoas. Además, hay juegos como dardos o tiro con arco, y un proyector enorme con todos los canales. Destacan los ventanales gigantes, que ofrecen un amanecer inolvidable. La atención de Pilar es excepcional: siempre pendiente de que no falte nada. Esta combinación de lujo, naturaleza y hospitalidad hace que quieras volver antes de haberte ido. Una experiencia extraordinaria.

Hemos pasado tres días muy especiales en un paraje único con maravillosa compañía del reino animal 😍 Eva nos ha recibido muy bien, ha sido reactiva y ha respondido rápidamente a nuestras peticiones. Hemos estado muy a gusto en la cabaña, bien decorada creando una atmósfera cálida y acogedora. Desayuno de bienvenida completo y con atenciones especiales 🤩 ¡Nos encantaría volver en verano!

La casa encantadora y de muy fácil acceso. Por poner una pega es el jacuzzi ahora en invierno no se llena de agua caliente y fue de lo único que podemos poner un pero. No descartamos volver!

Un alojamiento fantástico para pasar unos días de relax y tranquilos. Es una cabaña muy acogedora en la que te sientes como en casa, además cuenta con el jacuzzi que es una gozada y sobre todo en esta época, repetiría sin duda!

Atención de Jackson y Cristina fue inmejorable, pendientes desde el momento que hicimos la reserva Pasamos un día completo y nos quedamos con ganas de más, todo tal cual las fotos. Tuvimos un pequeño inconveniente con el agua (por culpa nuestra) lo comentamos y en menos de 5 minutos teníamos todo solucionado. Exelente para desconectar sin irte tan lejos de Madrid. Volveremos sin dudas 10/10👏🏻👏🏻👏🏻

Es un lugar fantástico, lo recomiendo completamente.

El alojamiento esta genial, es una finca grande para disfrutar en familia, nosotros la cogimos por la cercania a la Warner y la verdad que nos a encantado, la zona es tranquila y apartada de la ciudad, a 10 min de San Martin de la Vega. En verano con la piscina se tiene que estar de lujo. Volveremos si tenemos ocasión.

Pasamos el fin de semana muy tranquilo y desconectando que era lo que buscábamos! El lugar es tranquilo, la cabaña está muy bien equipada de utensilios y se pueden hacer varias rutas por la zona. Nos lo pasamos genial. Dar las gracias a Alberto que estuvo pendiente de si necesitábamos cualquier cosa y nos dio muy buenas recomendaciones de la zona.

Muy atentos la casa hermosa y con todos los servicios , no hay nada malo de la casa y es muy acogedora

Ha sido maravilloso, un lugar de ensueño con todas las facilidades para poder disfrutar con los cinco sentidos. Alfredo fue un anfitrión excelente que estuvo pendiente de nosotros en todo momento y nos facilitó a que la estancia fuera muy acogedora y no nos faltara nada. Cualquier duda siempre estaba disponible para nosotros. Fuimos un grupo de 10 personas y pudimos disfrutar muy cómodamente del espacio, pudimos descansar super bien en los dormitorios, de las estancias de comedor y baño muy limpias y hasta disfrutar de una sala de baile. Gracias a Alfredo y a este espacio precioso, estoy segura de que contaré con ello para mas eventos.

Hemos estado una noche, para descansar un poco de la ciudad. La Cabaña es, literal, una cabaña de madera y de dos pisos. Es muy acogedora. Tanto a Maite, como a Fernando, han estado siempre disponibles en todo momento. Incluso cuando no conseguíamos abrir el cajetín. Gracias, Francisco, por no impacientarse conmigo, jajaja. Las vistas desde la parte de atrás de la casa, son increíbles. Tiene un ventanal impresionante que da a un patio a modo de "chillout". Los atardeceres y amaneceres son dignos de presenciarlos desde el patio. Por la noche, se puede apreciar un cielo estrellado por una zona concreta (que no hay tanta iluminación). Recomiendo este alojamiento. Ideal para una escapada de un fin de semana. En verano, por las noches, se agradecen mucho.

La finquita es lo que buscábamos con mi familia, tranquilidad, naturaleza y piscina. A pesar que no tiene agua potable nos dejaron bidones de agua para los 4 días. También lo necesario para desayunar, se agradece el gesto. La comunicación fue buena y Yoel siempre estuvo atento por si necesitábamos algo. Se puede llegar en 20 minutos en taxi desde Guadalajara. No tiene microondas, ni horno ni lavavajillas ni lavadora, pero para nosotros no fue inconveniente. Es un lugar pensando para fiestas, lo tendremos en cuenta, pero nosotros la pasamos genial. Gracias

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Hemos pasado unos días maravillosos. La casa es preciosa y acogedora, está cerca de muchos lugares para ver. La recomiendo 100% Gergana es muy amable y hemos estado como en casa.

Casa preciosa. En un entorno de campo inmejorable. Urbanizacion tranquila, ideal para pasar unos dias de relax y desconectar del dia a dia. Limpio, ordenado. La chimenea es un puntazo. Calienta toda la casa

Cabaña íntima, acogedora y con el espacio idóneo para unos días de desconexión en pareja. Vistas maravillosas y zona muy tranquila. Está muy bien aislada, y perfectamente equipada para mantener la temperatura y hacer vida en la cabaña. Eric es un anfitrión muy amable y atento, hemos notado que ha pensado en todo para ofrecer la mejor experiencia a los huéspedes. Repetiremos seguro!!!

Lola fue una anfitriona genial. Nos recibió con tomates de su huerta y huevos de sus gallinas como obsequio y nos exoplicó todo lo que necesitábamos saber de la casa. El lugar es precioso, con caballos alrededor y unos perros muy majos que vienen a saludarte de vez en cuando. Nos costó un poco encontrar la entrada, no viene muy bien indicada y es fácil perderse. Estaría bien que se estableciera como punto de llegada el camino que sale de la carretera para entrar a la finca en lugar de la casa en sí. La piscina es una maravilla, tiene su propio baño, nevera, parrilla eléctrica y ducha, lo único es que aunque está dentro de la finca está apartada de la casa y hay que pillar el coche cada vez que quieres ir. Nos sorprendió que no apareciera en la descripción que Lola vive en la casa, separada por una puerta. Nosotros fuimos con la intención de estar aislados y sin contacto con nadie, y por suerte Lola se iba ese fin de semana, pero de no ser así no hay mucha privacidad.